Cervezas de Octubre por OleoDixit
Octubre y la cerveza van de la
mano, gracias al popular Oktoberfest y su versión vernácula, La Fiesta
Nacional de la Cerveza. Enterate más de los orígenes de estas fiestas y
los legados de la tradición alemana cervecera.
Todo amante de la cerveza tiene a octubre como su mes santo patrono.
Es el momento en que el mundo, con los alemanes como pioneros, celebra a
una de las bebidas más antiguas de la humanidad. Tanto hace que se
consume cerveza, que se cree que fue una de las primeras cosas que hizo
el ser humano cuando aprendió la agricultura. Hay evidencias tan
antiguas como del 2500 AC., pero se cree que el consumo es muy anterior,
tanto como quizás el Neolítico, 9500 años antes de la era cristiana. O
sea: aprendimos a plantar, y en seguida, a hacer birra.
Una bebida tan noble y antigua – que hasta ha sido considerada alimento líquido en la Edad Media, y que los ejércitos romanos usaban para marchar llamándola “pan del camino”- se merecía una celebración acorde. La versión alemana de Oktoberfest se extiende por dos semanas y termina con el primer fin de semana de octubre, y sus comienzos no tienen que ver tanto con la cerveza sino que se remontan al casamiento del príncipe Ludwig con la princesa Teresa de Saxe-Hildburghausen el 12 de octubre de 1810, y al año siguiente se volvió a celebrar como festejo de la cultura de Bavaria. Que justo esa cultura tuviera grandes raíces cerveceras hizo que poco a poco el festival se vaya centrando en eso: después de todo, la birra es a los bávaros lo que el fernet al cordobés.
Aunque no en todo Córdoba, claro. Villa General Belgrano es el enclave cervecero, producto de una gran inmigración alemana que desde los años ’60 realiza una fiesta para celebrar su cultura de la misma manera: con litros y litros de cerveza. Este 2015 va del 2 al 12 de Octubre, y además de mucha, mucha birra, hay también desfiles, ballets, conciertos, y todo tipo de eventos celebratorios de las distintas colectividades presentes.
En cuanto a la birra, suele haber para todos los gustos. De por sí representar a Alemania es difícil, ya que existen miles de variedades diferentes. El mundo cervecero es mucho más complejo que lo que las cervezas industriales parecen demostrar. “Básicamente toda la industria cervecera, de las grandes marcas, hacen lagers, entonces son cervezas muy tomables y livianas, y se está estereotipando que la lager es así, pero en realidad es medio un mito que las lagers son livianas”, explica Ramiro Rodríguez, a cargo de hacer las cervezas de Breoghan, que este año fueron premiadas en la South Beer Cup.
Según sostiene Rodríguez, la diferencia entre las principales “familias” de cervezas, Ales y Lagers, no reside en si son livianas o fuertes, o en su graduación alcohólica, sino simplemente en las levaduras que se usan y las temperaturas de fermentación, lo que les dará características distintas, el resto depende de la elaboración. Si bien hay exponentes de todo tipo en todos lados, la tradición inglesa suele estar más cercana a las ales, que se sirven a temperatura “de sótano”, como asegura Rodríguez, donde usualmente están almacenados los barriles, mientras que en Alemania la costumbre es beber las cervezas bien frías, lo que las hace más tomables y que es, en definitiva, la forma de beber que se ha esparcido por el mundo.
Este octubre, entonces, ya sean en Bavaria, Villa General Belgrano o tu bar favorito en Buenos Aires (Breoghan es una gran idea), es un buen momento para tomar una birra bien fresca y brindar por los años de tradición que han llevado ese milagroso vaso a tu s manos. ¡Salúd!
Una bebida tan noble y antigua – que hasta ha sido considerada alimento líquido en la Edad Media, y que los ejércitos romanos usaban para marchar llamándola “pan del camino”- se merecía una celebración acorde. La versión alemana de Oktoberfest se extiende por dos semanas y termina con el primer fin de semana de octubre, y sus comienzos no tienen que ver tanto con la cerveza sino que se remontan al casamiento del príncipe Ludwig con la princesa Teresa de Saxe-Hildburghausen el 12 de octubre de 1810, y al año siguiente se volvió a celebrar como festejo de la cultura de Bavaria. Que justo esa cultura tuviera grandes raíces cerveceras hizo que poco a poco el festival se vaya centrando en eso: después de todo, la birra es a los bávaros lo que el fernet al cordobés.
Aunque no en todo Córdoba, claro. Villa General Belgrano es el enclave cervecero, producto de una gran inmigración alemana que desde los años ’60 realiza una fiesta para celebrar su cultura de la misma manera: con litros y litros de cerveza. Este 2015 va del 2 al 12 de Octubre, y además de mucha, mucha birra, hay también desfiles, ballets, conciertos, y todo tipo de eventos celebratorios de las distintas colectividades presentes.
En cuanto a la birra, suele haber para todos los gustos. De por sí representar a Alemania es difícil, ya que existen miles de variedades diferentes. El mundo cervecero es mucho más complejo que lo que las cervezas industriales parecen demostrar. “Básicamente toda la industria cervecera, de las grandes marcas, hacen lagers, entonces son cervezas muy tomables y livianas, y se está estereotipando que la lager es así, pero en realidad es medio un mito que las lagers son livianas”, explica Ramiro Rodríguez, a cargo de hacer las cervezas de Breoghan, que este año fueron premiadas en la South Beer Cup.
Según sostiene Rodríguez, la diferencia entre las principales “familias” de cervezas, Ales y Lagers, no reside en si son livianas o fuertes, o en su graduación alcohólica, sino simplemente en las levaduras que se usan y las temperaturas de fermentación, lo que les dará características distintas, el resto depende de la elaboración. Si bien hay exponentes de todo tipo en todos lados, la tradición inglesa suele estar más cercana a las ales, que se sirven a temperatura “de sótano”, como asegura Rodríguez, donde usualmente están almacenados los barriles, mientras que en Alemania la costumbre es beber las cervezas bien frías, lo que las hace más tomables y que es, en definitiva, la forma de beber que se ha esparcido por el mundo.
Este octubre, entonces, ya sean en Bavaria, Villa General Belgrano o tu bar favorito en Buenos Aires (Breoghan es una gran idea), es un buen momento para tomar una birra bien fresca y brindar por los años de tradición que han llevado ese milagroso vaso a tu s manos. ¡Salúd!
Comentarios