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Se usan para elegir el momento en qué se debe probar un vino. Y hay hasta una App para el celular.
La influencia de las fases lunares sobre muchos de nuestros temas cotidianos es motivo de estudio desde hace mucho tiempo. Y el vino no es una excepción. La agricultura biodinámica está en auge dentro del sector vitivinícola y al punto de que para algunos productores se ha convertido en una ‘Biblia’.
Es un tema complejo, lleno de variantes e interpretaciones personales, pero el motivo de estas líneas no es sumergirnos en él, sino contarles cómo todo esto de la influencia lunar se está aplicando, de más en más, a la cata de vinos: a la determinación de los momentos más apropiados para la degustación, ya que, según algunos entendidos, la fase lunar tendrá grandes influencias en la expresión tanto aromática como gustativa del vino que se va a probar.
Lo descubrí solo hace algunos días y de una forma bastante particular. Estando en un restaurante en España, su chef y dueño me invitó amablemente a compartir con él mis opiniones sobre los vinos que hacían parte de un menú de degustación que en ese momento ofrecía en otra mesa. Al servir el último vino, me miró con preocupación, pidiendo mi opinión. Se trataba de un vino blanco español bastante reconocido, el Viña Tondonia Reserva.
Le dije que para mí el vino estaba “correcto”, a lo que él enfáticamente respondió: “No, el vino no tiene la expresión que debería tener”. Y nos preguntó, a mí y quienes estábamos en la mesa: “¿Qué pasa hoy?”, para luego explicarnos que había probado una copa de la misma botella el día anterior y que su experiencia había sido totalmente diferente.
Decidió, entonces, abrir un par de botellas del mismo vino, pero de diferentes añadas, y todos se comportaron de igual manera: los vinos se mostraban apagados, planos, apenas correctos y sin llegar a las expectativas que ese gran vino debería llenar.
En ese momento, alguien que compartía mesa con nosotros le dijo a nuestro anfitrión que al día siguiente sería ‘luna de fuego’. Él nos miró aliviado y sentenció: “Ya lo sabía, algo tenía que estar pasando, ahora entiendo el comportamiento de estos vinos”.
Mi curiosidad me abrió la puerta a algo realmente interesante y fascinante: para los seguidores de la biodinámica es tan clara la influencia de la luna en la cata del vino, que en muchas oportunidades se rehúsan a realizar presentaciones de sus vinos solo porque la fase lunar no es la propicia para resaltar las propiedades de los vinos que ellos quisieran destacar. Y el tema es tan profundo, que se han desarrollado calendarios y aplicaciones para consultar el tema. De hecho, esta bodega tiene su propio calendario y no programa ninguna cata importante sin tenerlo en cuenta.
La teoría es que el vino tiene cuatro grupos de expresión principales, que van estrechamente de la mano con el calendario lunar. Estos grupos dan origen a cuatro tipos de día que van a marcar los resultados de catar un vino en un determinado instante. La relación de la fase lunar y el momento de la cata se resume así:
Día Fruto. Cuando la luna se encuentra en alguna de las constelaciones del elemento ‘Fuego’ (Aries, Leo y Sagitario), el vino potencia sus matices frutales y realza el cuidado de la bodega en la adaptación de la variedad al terroir o terruño.
Día Flor. Si las constelaciones que inciden en la luna son del elemento ‘Aire’ (Géminis, Libra y Acuario), las manifestaciones aromáticas y gustativas del vino tendrán matices intensamente florales.
Día Raíz. Si las constelaciones son del elemento ‘Tierra’ (Tauro, Virgo y Capricornio) los vinos destaca¬ran sus coloraciones tánicas y su mineralidad.
Día Hoja. Finalmente si la influencia sobre la luna está en las constelaciones del elemento ‘Agua’ (Cáncer, Escorpio y Piscis), los aromas y expresiones gustativas serán marcadamente vegetales. Estas expresiones, podrían ser apropiadas para la cata de algunos blancos con notas herbáceas, pero difícilmente favorecerán la cata de vinos tintos.
En cambio, son bastante más prudentes, organizando catas y presentaciones en los días ‘Raíz’ y ‘Hoja’, ya que en estos momentos se hará más difícil la apreciación de muchas de las características esenciales de un vino, limitándolo solo a ejercicios de cata de vinos muy concretos en los que la mineralidad o el carácter herbáceo de un vino es lo que se persigue destacar.
Recomiendan, igualmente, y de una manera contundente, cancelar ejercicios de cata si estos coinciden con un nodo o perigeo lunar, ya que en esos momentos se producen grandes perturbaciones que afectarían el resultado de los mismos.
Por supuesto hay quienes considerarán estas teorías como exageradas, locas y extravagantes, pero nunca sobra experimentar y mirar hasta dónde personas serias y respetadas en su oficio pueden tener razón al llegar a estos niveles de sofisticación.
Si han llegado hasta acá y le ven algún sentido al tema, les recomiendo que bajen, estudien y pongan a prueba la aplicación ‘WhenWine’, que les indicará día a día y hora a hora, los momentos adecuados, los menos propicios y los definitivamente no deseables para hacer un ejercicio de prueba de un vino particular. Ya me contarán como les fue con esto del vino y la luna.
Por Juan Antonio Zuleta
Enófilo e importador
Revista VINOS. Edición Diciembre de 2015
Fuente: http://www.eltiempo.com/multimedia/especiales/catar-vinos-segun-las-fases-de-la-luna/16466572
Es un tema complejo, lleno de variantes e interpretaciones personales, pero el motivo de estas líneas no es sumergirnos en él, sino contarles cómo todo esto de la influencia lunar se está aplicando, de más en más, a la cata de vinos: a la determinación de los momentos más apropiados para la degustación, ya que, según algunos entendidos, la fase lunar tendrá grandes influencias en la expresión tanto aromática como gustativa del vino que se va a probar.
Le dije que para mí el vino estaba “correcto”, a lo que él enfáticamente respondió: “No, el vino no tiene la expresión que debería tener”. Y nos preguntó, a mí y quienes estábamos en la mesa: “¿Qué pasa hoy?”, para luego explicarnos que había probado una copa de la misma botella el día anterior y que su experiencia había sido totalmente diferente.
Decidió, entonces, abrir un par de botellas del mismo vino, pero de diferentes añadas, y todos se comportaron de igual manera: los vinos se mostraban apagados, planos, apenas correctos y sin llegar a las expectativas que ese gran vino debería llenar.
En ese momento, alguien que compartía mesa con nosotros le dijo a nuestro anfitrión que al día siguiente sería ‘luna de fuego’. Él nos miró aliviado y sentenció: “Ya lo sabía, algo tenía que estar pasando, ahora entiendo el comportamiento de estos vinos”.
Calendario lunar... ¡para catas!
No tengo que explicarles lo desconcertado e intrigado que quedé. Por eso unos pocos días después, durante una visita a una muy reconocida bodega de La Rioja, en España, y en medio de una interesante cata, quise aprovechar los conocimientos de esta bodega en las artes biodinámicas para tratar de entender la anécdota del restaurante.Mi curiosidad me abrió la puerta a algo realmente interesante y fascinante: para los seguidores de la biodinámica es tan clara la influencia de la luna en la cata del vino, que en muchas oportunidades se rehúsan a realizar presentaciones de sus vinos solo porque la fase lunar no es la propicia para resaltar las propiedades de los vinos que ellos quisieran destacar. Y el tema es tan profundo, que se han desarrollado calendarios y aplicaciones para consultar el tema. De hecho, esta bodega tiene su propio calendario y no programa ninguna cata importante sin tenerlo en cuenta.
La teoría es que el vino tiene cuatro grupos de expresión principales, que van estrechamente de la mano con el calendario lunar. Estos grupos dan origen a cuatro tipos de día que van a marcar los resultados de catar un vino en un determinado instante. La relación de la fase lunar y el momento de la cata se resume así:
Día Fruto. Cuando la luna se encuentra en alguna de las constelaciones del elemento ‘Fuego’ (Aries, Leo y Sagitario), el vino potencia sus matices frutales y realza el cuidado de la bodega en la adaptación de la variedad al terroir o terruño.
Día Flor. Si las constelaciones que inciden en la luna son del elemento ‘Aire’ (Géminis, Libra y Acuario), las manifestaciones aromáticas y gustativas del vino tendrán matices intensamente florales.
Día Raíz. Si las constelaciones son del elemento ‘Tierra’ (Tauro, Virgo y Capricornio) los vinos destaca¬ran sus coloraciones tánicas y su mineralidad.
Día Hoja. Finalmente si la influencia sobre la luna está en las constelaciones del elemento ‘Agua’ (Cáncer, Escorpio y Piscis), los aromas y expresiones gustativas serán marcadamente vegetales. Estas expresiones, podrían ser apropiadas para la cata de algunos blancos con notas herbáceas, pero difícilmente favorecerán la cata de vinos tintos.
Los mejores días son...
Dicen, los que siguen estas teorías, que es importante presentar los vinos en el periodo lunar que potencie las características que se quieren destacar. Para ellos, los días ideales serían ‘Flor’ y ‘Fruto’, momentos en que se tendrán las mejores sensaciones y se percibirá mayor equilibrio.En cambio, son bastante más prudentes, organizando catas y presentaciones en los días ‘Raíz’ y ‘Hoja’, ya que en estos momentos se hará más difícil la apreciación de muchas de las características esenciales de un vino, limitándolo solo a ejercicios de cata de vinos muy concretos en los que la mineralidad o el carácter herbáceo de un vino es lo que se persigue destacar.
Recomiendan, igualmente, y de una manera contundente, cancelar ejercicios de cata si estos coinciden con un nodo o perigeo lunar, ya que en esos momentos se producen grandes perturbaciones que afectarían el resultado de los mismos.
Por supuesto hay quienes considerarán estas teorías como exageradas, locas y extravagantes, pero nunca sobra experimentar y mirar hasta dónde personas serias y respetadas en su oficio pueden tener razón al llegar a estos niveles de sofisticación.
Si han llegado hasta acá y le ven algún sentido al tema, les recomiendo que bajen, estudien y pongan a prueba la aplicación ‘WhenWine’, que les indicará día a día y hora a hora, los momentos adecuados, los menos propicios y los definitivamente no deseables para hacer un ejercicio de prueba de un vino particular. Ya me contarán como les fue con esto del vino y la luna.
Por Juan Antonio Zuleta
Enófilo e importador
Revista VINOS. Edición Diciembre de 2015
Fuente: http://www.eltiempo.com/multimedia/especiales/catar-vinos-segun-las-fases-de-la-luna/16466572
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