La mejor manera de de ir a comer por OleoDixit
A mi manera celebra sus cuatro
años de vida con su sello distintivo: buen servicio, exquisita cocina
tradicional mediterránea y de autor, y un ambiente moderno y acogedor.
En muchas culturas tradicionalmente se vinculaba a la nutrición con el afecto y al alimentar con la sanación. Buscaban convertir el rito de la nutrición ajena en un gesto cargado de amor. A mi manera,
que celebra sus cuatro años de vida, es un maravilloso lugar donde
consiguen recuperar el culto a la cocina, para sorprender con la
creación de un mágico ritual. Saben que todo acto gastronómico es un
acto comunitario, ya que siempre se trabaja para el bien del otro.
A mi manera presenta un salón sobrio y moderno, y una decoración amena, que no satura los sentidos. Reluce el blanco de sus paredes y manteles, que se combinan con el negro del mobiliario. Para destacar, además de los sectores tradicionales de mesas y sillas, encontramos espacios con respaldo sobre los laterales, ideales para una mayor intimidad.
En cuanto a su cocina, la carta permite vislumbrar diversas presentaciones, nuevos platos, y una ampliación en el menú como una sabrosísima forma de homenajear a todos los que hicieron posible este cuarto aniversario: buñuelos de espinaca ala pomodoro, ñoquis de espinaca soufflé en salsa fileto, crema y pesto, canelones de pollo y verdura, risotto a la crema de parmesano con rúcula, solomillo de cerdo envuelto en panceta con reducción de vino marsala y oporto, finas hierbas y acompañado de batatas fritas, ojo de bife con salsa de tomates secos, jamón crocante y papas rústicas, o el lenguado en filet salteado con oliva, ajo, limón, vinagre, acompañados de papas al natural.
Solo resta entregarse confiado a esta fascinante experiencia: la atenta mirada de su dueño, Carlos, que revisa cada detalle y la increíble capacidad de Sergio, a cargo de un equipo comprometido con la cordialidad en el servicio, junto a una cocina tradicional, con influencia mediterránea y platos de autor con toques gourmet. Imperdible.
A mi manera presenta un salón sobrio y moderno, y una decoración amena, que no satura los sentidos. Reluce el blanco de sus paredes y manteles, que se combinan con el negro del mobiliario. Para destacar, además de los sectores tradicionales de mesas y sillas, encontramos espacios con respaldo sobre los laterales, ideales para una mayor intimidad.
En cuanto a su cocina, la carta permite vislumbrar diversas presentaciones, nuevos platos, y una ampliación en el menú como una sabrosísima forma de homenajear a todos los que hicieron posible este cuarto aniversario: buñuelos de espinaca ala pomodoro, ñoquis de espinaca soufflé en salsa fileto, crema y pesto, canelones de pollo y verdura, risotto a la crema de parmesano con rúcula, solomillo de cerdo envuelto en panceta con reducción de vino marsala y oporto, finas hierbas y acompañado de batatas fritas, ojo de bife con salsa de tomates secos, jamón crocante y papas rústicas, o el lenguado en filet salteado con oliva, ajo, limón, vinagre, acompañados de papas al natural.
Solo resta entregarse confiado a esta fascinante experiencia: la atenta mirada de su dueño, Carlos, que revisa cada detalle y la increíble capacidad de Sergio, a cargo de un equipo comprometido con la cordialidad en el servicio, junto a una cocina tradicional, con influencia mediterránea y platos de autor con toques gourmet. Imperdible.
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