Nuevos polos de consumo relegarán a los "clásicos" países productores de vino


El 39% de la demanda se localiza en la Unión Europea. En 2014 se espera que el consumo global sea de 243 millones de hectolitros. Argentina sumará al balance mundial 15,2 millones de hl en 2014 (+1 %)



Nuevos polos de consumo relegarán a los países que tradicionalmente han acaparado las compras de vino y, según constatan los expertos, en torno al 39 % de la demanda se localiza ya fuera de la Unión Europea, ocho puntos porcentuales más que en el año 2000, gracias en parte al tirón asiático.

Según los datos de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), en 2014 el consumo global será aproximadamente de 243 millones de hectolitros, unos niveles todavía distantes respecto a los 271 millones que se producirán este año.

Según este organismo, el mercado vitivinícola es un sector cada vez más internacionalizado y, así, el porcentaje de producción vinícola que se destina al comercio mundial se ha prácticamente duplicado: en 2000, el 25 % del vino consumido en el mundo era importado; en 2013, este porcentaje ha trepado hasta más del 40 %.

En 2013, el comercio de vino disminuyó un 2,2 % en volumen, lo que representa 98 millones de hectolitros, pero el alza de precios relanzó un 1,5 % los ingresos, hasta 25.700 millones de euros.

Entre las tendencias de mercado, los espumosos se perfilan como referencias protagonistas, con un imparable crecimiento.

Así, se produjeron 17,6 millones de hectolitros de vinos espumosos en 2013, una cifra que corresponde al 7 % de la producción mundial de vino, según la OIV, mientras que el consumo rondó 15,4 millones de hl, es decir, un 30 % de aumento en los últimos 10 años.

El comercio mundial también ha crecido de manera sostenida hasta 8,7 millones de hectolitros en 2013 y 4.300 millones de euros, y el porcentaje de las exportaciones de vinos espumosos llega hasta un 9 % del volumen total de las exportaciones de vino y el 18 % de su valor, añade.

En referencia a las producciones de este año, los datos de esta organización supranacional, analizados por el Observatorio español del Mercado del Vino, apuntan hacia una reducción del 6 % respecto al año anterior, hasta 271 millones de hectolitros (excluyendo zumos y mostos), ya que el ejercicio se ha caracterizado por condiciones climáticas poco favorables en algunos países de Europa.

Francia rondará los 46,2 millones de hl este año, por delante de Italia (44,4 millones), mientras que España ha vuelto a un nivel medio de producción (37 millones), tras el año récord en 2013.

La producción en el hemisferio sur y en EEUU sigue aumentando.

Argentina sumará al balance mundial 15,2 millones de hl en 2014 (+1 %); Nueva Zelanda tendrá récord con 3,2 millones (+29 %); Sudáfrica, 11 millones (+4 %), y EEUU registrará asimismo un nivel de producción elevado (22,5 millones).

De vuelta al mercado español y, respecto a los precios de los graneles se refiere, se detectan algunos avances.

En concreto, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) recoge del 3 al 9 de noviembre una destacada subida del 3,57 % en el precio en origen del vino blanco sin indicación geográfica a granel, hasta 2,05 euros por hectogrado.

Mientras, se mantiene invariable el tinto, respecto a la semana anterior, en 2,86 euros por hectogrado, según el Departamento.

Por mercados representativos, los vinos blancos repuntan ligeramente en Albacete y Badajoz, mientras que, en el caso del tinto, sube en Valencia y se mantiene en Ciudad Real, Cuenca, Badajoz y Toledo; cae en Albacete y Murcia.

El vino blanco se paga a 2,72 euros por hectogrado en Albacete; 2,27 en Badajoz; 1,55 en Ciudad Real; a 1,94 en Cuenca y a 2,60 en Toledo.

Y el tinto lo hace a 3,36 en Albacete; 2,25 en Ciudad Real; 3,03 en Cuenca; 2,74 en Badajoz; 2,84 en Murcia; 2,74 en Toledo y 2,84 en Valencia.

Fuente: http://www.abc.es/agencias/noticia.asp?noticia=1720338


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