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Fuente: Diario Los Andes | Miguel A. Flores. 
Podrán justificarse hasta U$S 5 mil en gastos no previstos en permiso de embarque, y U$S 100 mil al año. Para los operadores, beneficiará a pymes y facilitará el cobro de reintegros. Casi al mismo tiempo en que la AFIP implementó el control cambiario para frenar la fuga de capitales, el Banco Central dió una señal a los exportadores vitivinícolas preocupado por las exigencias en el ingreso de divisas: desde ahora, cualquier bodega podrá obtener el llamado cumplido de embarque, sin necesidad de autorización del BCRA, siempre que justifique gastos no previstos en los permisos por hasta U$S 5 mil, y un máximo de U$S 100 mil anuales. Si bien no resuelve las causas de firmas sumariadas por no declarar ingresos en los 180 días corridos posteriores a cada transacción (para unos, atribuíble a demoras en el cobro; para otros, simple desconocimiento de la ley) la medida fue bien recibida. Se remonta a un reclamo formalizado al gerente de Cambios del Central, José Rodríguez, quien, dicen, la propició.
Algunos conocedores creen que la circular 5233 emitida a fines de octubre morigerará las duras sanciones penales basadas en la presunción de ilícito, como subfacturación o transacciones irregulares (hasta 6 años de cárcel, y 10 veces el monto involucrado). Para otros, en cambio, es una flexibilización favorable a bodegas pymes.
Conflictividad y rigor
Si es un exportador jóven, sépalo: en caso de que hasta ahora haya declarado menos divisas a causa del costo de análisis de laboratorio en destino o débitos que su importador le hacía en concepto de gastos en degustaciones o similares, ahora podrá hacerlo con los topes mencionados, sin el visto bueno del Central ni exponerse a sanciones.
“Había disposiciones con el espíritu de la crisis de 2001 y 2002. Más tarde, muchas bodegas exportaban por un importe y se les descontaban gastos administrativos, contabilizados, pero sin declarar al Central, lo que generaba sumarios aún no siendo deliberado.
Esto será una herramienta para las finanzas de una pyme pero también para la logística de las grandes”, señala Juan Carlos Pina, de Bodegas de Argentina.
El despachante de aduana Carlos Clément ilustra el efecto de los inevitables costos adicionales que generan los monopolios estatales de bebidas alcohólicas, como el Liquor Control Board de Canadá. Según el operador, la medida “al completarse los permisos, reducirá la conflictividad de la normativa cambiaria. Antes no había opción”.
Otros ejemplos contemplados por la comunicación del BCRA son robos, pérdidas o mermas de mercadería antes de llegar a destino. De ése modo no será obligación ingresar divisas por un despacho “no perfeccionado” (que nunca llegó a destino) por cualquiera de ésos motivos.
Como le ocurrió a una bodega de Maipú que, al habersele emitido por error el permiso de embarque pese a al robo de un contenedor a la salida de la Zona Primaria Aduanera, debió declarar divisas por el total. Ahora, la denuncia la eximiría.
“Es un mensaje positivo.Pero sigue habiendo un criterio rigorista en las penas por ingreso tardío de divisas desde el Central”, observa por su parte Gustavo Quevedo, del área exportaciones de Trivento, para quien seguirán habiendo inconvenientes en tanto “no se tomen recaudos. Muchas veces no se presentan pruebas, por desconocer o exceso de confianza”.
Si de criterio rigorista se trata, habrá que esperar cómo entra en acción la Dirección de Investigación Financiera creada por AFIP el viernes 4, con la función de “analizar la información vinculada al movimiento de divisas, acciones, bonos y demás títulos valores y todo tipo de crédito originado en operaciones económicas y financieras, así como también operaciones sospechadas de lavado de activos”.
De reintegros y sumarios
Para Clément la medida permitirá tambien viabilizará el cobro de reintegros (hoy demora hasta 150 días) al actuar sobre lo que llama tres “bloqueos”: el pago de derechos de exportación, el ingreso de divisas (avalado por los bancos “los primeros jueces” de los movimientos), y estado impositivo.
En cuanto a los sumarios iniciados por no ingresar divisas en término (180 días corridos, o 150 hábiles), coincide con Paula Rinaldi, del área de Comercio Exterior de BA: la nueva resolución no tiene efecto retroactivo para anularlos. “Sí puede atenuar casos futuros. Y servirá para apelar ante la Justicia”.
Podrán justificarse hasta U$S 5 mil en gastos no previstos en permiso de embarque, y U$S 100 mil al año. Para los operadores, beneficiará a pymes y facilitará el cobro de reintegros. Casi al mismo tiempo en que la AFIP implementó el control cambiario para frenar la fuga de capitales, el Banco Central dió una señal a los exportadores vitivinícolas preocupado por las exigencias en el ingreso de divisas: desde ahora, cualquier bodega podrá obtener el llamado cumplido de embarque, sin necesidad de autorización del BCRA, siempre que justifique gastos no previstos en los permisos por hasta U$S 5 mil, y un máximo de U$S 100 mil anuales. Si bien no resuelve las causas de firmas sumariadas por no declarar ingresos en los 180 días corridos posteriores a cada transacción (para unos, atribuíble a demoras en el cobro; para otros, simple desconocimiento de la ley) la medida fue bien recibida. Se remonta a un reclamo formalizado al gerente de Cambios del Central, José Rodríguez, quien, dicen, la propició.Algunos conocedores creen que la circular 5233 emitida a fines de octubre morigerará las duras sanciones penales basadas en la presunción de ilícito, como subfacturación o transacciones irregulares (hasta 6 años de cárcel, y 10 veces el monto involucrado). Para otros, en cambio, es una flexibilización favorable a bodegas pymes.
Conflictividad y rigor
Si es un exportador jóven, sépalo: en caso de que hasta ahora haya declarado menos divisas a causa del costo de análisis de laboratorio en destino o débitos que su importador le hacía en concepto de gastos en degustaciones o similares, ahora podrá hacerlo con los topes mencionados, sin el visto bueno del Central ni exponerse a sanciones.
“Había disposiciones con el espíritu de la crisis de 2001 y 2002. Más tarde, muchas bodegas exportaban por un importe y se les descontaban gastos administrativos, contabilizados, pero sin declarar al Central, lo que generaba sumarios aún no siendo deliberado.
Esto será una herramienta para las finanzas de una pyme pero también para la logística de las grandes”, señala Juan Carlos Pina, de Bodegas de Argentina.
El despachante de aduana Carlos Clément ilustra el efecto de los inevitables costos adicionales que generan los monopolios estatales de bebidas alcohólicas, como el Liquor Control Board de Canadá. Según el operador, la medida “al completarse los permisos, reducirá la conflictividad de la normativa cambiaria. Antes no había opción”.
Otros ejemplos contemplados por la comunicación del BCRA son robos, pérdidas o mermas de mercadería antes de llegar a destino. De ése modo no será obligación ingresar divisas por un despacho “no perfeccionado” (que nunca llegó a destino) por cualquiera de ésos motivos.
Como le ocurrió a una bodega de Maipú que, al habersele emitido por error el permiso de embarque pese a al robo de un contenedor a la salida de la Zona Primaria Aduanera, debió declarar divisas por el total. Ahora, la denuncia la eximiría.
“Es un mensaje positivo.Pero sigue habiendo un criterio rigorista en las penas por ingreso tardío de divisas desde el Central”, observa por su parte Gustavo Quevedo, del área exportaciones de Trivento, para quien seguirán habiendo inconvenientes en tanto “no se tomen recaudos. Muchas veces no se presentan pruebas, por desconocer o exceso de confianza”.
Si de criterio rigorista se trata, habrá que esperar cómo entra en acción la Dirección de Investigación Financiera creada por AFIP el viernes 4, con la función de “analizar la información vinculada al movimiento de divisas, acciones, bonos y demás títulos valores y todo tipo de crédito originado en operaciones económicas y financieras, así como también operaciones sospechadas de lavado de activos”.
De reintegros y sumarios
Para Clément la medida permitirá tambien viabilizará el cobro de reintegros (hoy demora hasta 150 días) al actuar sobre lo que llama tres “bloqueos”: el pago de derechos de exportación, el ingreso de divisas (avalado por los bancos “los primeros jueces” de los movimientos), y estado impositivo.
En cuanto a los sumarios iniciados por no ingresar divisas en término (180 días corridos, o 150 hábiles), coincide con Paula Rinaldi, del área de Comercio Exterior de BA: la nueva resolución no tiene efecto retroactivo para anularlos. “Sí puede atenuar casos futuros. Y servirá para apelar ante la Justicia”.
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